miércoles, 13 de octubre de 2010

pagina 186

meses en las provincias centrales. Sin embargo, el pollito de mar suele hacerse sedentario y permanecer durante todo el año en la costa de Antofagasta y de Tarapacá.

Las migraciones se ciñen, en general, a rutas determinadas que han sido cuidadosamente estudiadas. Una gran ruta migratoria para algunas aves de Sudamérica es la que tiene por centro de dispersión y de llegada las praderas de la Patagonia austral.

En el mes de mayo llegan a nuestro país, al valle central, el pachurrón, la bandurria y la gallareta. Estas aves se alimentan de larvas de insectos y de animalitos de los esteros, lagunas y pantanos, a cuyas orillas viven. En cuanto los pantanos y charcos se secan y los esteros reducen su caudal, toman el camino de regreso, en pequeñas bandadas, y sin ninguna formación rigurosa en su vuelo que hagan notar su partida.

Un loro de las provincias centrales de Chile, el choroy, anida y vive en familia en cuevas que labra en los barrancos andinos. Realiza cortas migraciones hacia los pehuenes (Araucarias), por cuyos frutos' siente especial predilección. En este caso el impulso para la migración de esta ave es la fructificación del pehuén y la migración queda circunscrita a la zona bien delimitada que la planta ocupa.

También efectúan migraciones algunos animales pílíferos, como el caribú o reno de América, que vive en las tierras áridas del extremo norte. Estos animales ungulígrados poseen un pelaje que retiene gran cantidad de aire, por lo cual es una excelente protección contra las inclemencias del tiempo, pero realizan migraciones porque en el invierno se alimentan de liqúenes, los cuales llegan a escasear o quedan cubiertos por el hielo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario